En esta charla comprobaremos por activa y por pasiva la tremenda actuación de tan infausta persona. Montini era muy listo, y para desviar la atención de sí mismo, de que él era el principal culpable de lo que estaba ocurriendo, astutamente, sibilinamente, calculadamente, dijo aquella frase bien estudiada, el 29 de junio de 1972, de que: El humo de Satanás ha penetrado por una grieta en el templo de Dios. Y todo el mundo se quedó tan tranquilo sin apenas reflexionar que era el mismo Pablo VI, el humo de Satanás y el fuego más ardiente… además de ser también uno de los mortales que mejor han servido al maligno a lo largo de toda la historia del mundo. Se puede afirmar con seguridad absoluta que Montini arruinó, destruyó, desmanteló… todo, absolutamente, todo. ¡Juan XXIII comenzó… Pablo VI remató! Les aseguro que si escuchan la conferencia no se van a aburrir para nada.
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